LA RELIGIÓN “MODA O IDEOLOGÍA” un debate entre las nuevas tendencias de las juventudes.

Por: Karen Madera, Nohelia Córdoba “La sangre espiritual de nuestro Padre Espiritual corre por nuestras almas, como la sangre de nuestros padres terrenales por nuestras venas. Todos, científicos, filósofos y humanos de fe, creyentes y ateos, llevamos la luz de la divinidad, la sangre espiritual de nuestro Dios-Padre. Todos somos ángeles; algunos, obedientes y leales; otros, rebeldes e incrédulos. Todos somos hermanos carnales y espirituales y por tanto debemos ser fraternales”. Omar Ortiz Esparza Apóstol de paz. La religión es un conjunto de dogmas o creencias que establecemos las personas y que aplicamos en nuestra vida, basándonos en distintos dioses; a su vez se convierten en prácticas acerca de lo considerado como divino o sagrado, tanto personales como colectivas, de tipo existencial, moral y espiritual. Entre las religiones predominantes en el mundo el cristianismo resulta ser una de las más practicadas, al igual que el musulmán, el hinduismo, budismo, entre otras. Es así como cada una de estas religiones está centrada en una deidad, llamada Dios, que es un ser supremo creador del universo y de todas las cosas terrenales, por decir, es un ser omnipotente, presente en todas partes y especialmente en el corazón de los seres humanos. Las creencias religiosas son ideas consideradas como verdaderas por quienes profesan una determinada religión. Siendo el fundamento de las religiones y del culto religioso. Por otra parte la moda son aquellas tendencias repetitivas, ya sea de ropa, accesorios, estilos de vida y maneras de comportarse, que marcan o modifican la conducta de una persona y que sin lugar a dudas forma parte de las nuevas modalidades creadas por los procesos interactivos, generados por las redes cibernéticas de los mass-medias que se expresan en la formación de una nueva culturalización virtual. La ideología es la percepción individual del ser humano, es una orientación de tipo personal, que adquirimos en nuestro entorno, por lo cual vamos enfocados, interpretando el sentido de lo que somos y a que venimos al mundo. Además es un conjunto coherente de ideas establecidas por las personas en diferentes ámbitos donde se desarrolla la sociedad. Quizás para muchos sea menos entendible el saber que las nuevas generaciones han intentado modificar sus ideologías o tendencias religiosas debido al desarrollo por el que el mundo va corriendo, esto se debe a que la globalización y las ciencias políticas van penetrando a fondo en la percepción individual, lo que conlleva a que las cosas sean tan diferentes. Según el Presbítero John Jairo Soto “los jóvenes de ahora, han perdido el interés por los lineamientos a los que conduce la fe católica, la valorización del matrimonio, la familia compuesta de un hombre y una mujer con sus hijos, la escuela y la educación, la formación al sentido de la ley civil y moral, la inserción social y profesional de las nuevas generaciones, la calidad del ambiente, el sentido de la justicia y la paz, lo que ha provocado un gran desequilibro de la religión y generando otras ideologías encaminadas a nuevos conocimientos”. No es fácil decir que las juventudes están orientadas hacia nuevas ideologías religiosas, porque ya están establecidas normas y leyes en donde la libertad de culto va dirigida a todos, en donde cada quien puede hacer lo que en realidad vaya acorde con sus ideas. Pero es importante saber que todo este vuelco a la fe, está orientado por las nuevas tecnologías, que le facilitan a las personas interactuar de la manera interpersonal de acuerdo con sus características. El sicólogo León Sierra afirma que, “los jóvenes no tienen un diálogo muy abierto con la religión, no hay un discurso cercano a ellos. La religión católica necesita abrirse más a los jóvenes, acercándose más a su sentir y a sus necesidades reales, cultivando los valores que la religión cultiva. La forma del discurso y la forma de hacerlo está un poco obsoleto para la realidad que vive el joven de hoy”. La religión y la moda parecen conceptos tan diferentes que al menos en la cabeza de todos asociarlos se hace muy complejo. Pero nada más lejos de la realidad; una religión implica creer, tener fe…y todos creemos en algo aunque ese algo sea “nada”. Gracias a que estamos tan inmersos en el universo de la globalización las generaciones han optado por tener clarividencia en lo que les pueda facilitar más libertad. Según Elaine Bedoya docente de cantos religiosos de la Universidad Pontificia Bolivariana de la Ciudad de Montería, todos los seres humanos nos encontramos en un momento trascendental de la vida, en cuanto a fenómeno religioso. Estamos en un contexto donde las tradiciones religiosas se dan y se siguen dando a través del tiempo. La juventud de hoy no se muestra muy participativa ni tocada a hacer parte de estas actividades. Para ella los jóvenes se ven compenetrados con la tecnología, por ejemplo, al estar de la mano con la Internet en donde entran en un mundo tan grande donde se pueden observar todas las modas, toda la globalización…Estas personas están llamadas a estar en distintas corrientes como las tribus urbanas: los emos, los góticos, entre otros. Esta serie de elementos de otras culturas se van insertando y lo van haciendo un ser humano distinto. Cabe anotar que la heterogeneidad ha llevado a consolidar la ideología religiosa, incluso en que estas nuevas generaciones se vean tan involucradas en la aceptación de las tendencias sexuales, con el pasar del tiempo se ha llegado a ver la homosexualidad, transexualidad, bisexualidad, como algo tan natural en la sociedad, y mientas la iglesia rechaza esta forma de vida, muchos están respaldándolas de acuerdo a sus ideologías, porque ya no penetra la fe o tendencia religiosa sino que se van encaminando a distintos lineamientos que quizás las mismas personas establecemos. En el mundo existen distintas ideologías, costumbres y religiones. En el Departamento de Córdoba también existe todo este tipo de situaciones que hacen que el ser humano sea distinto. Dos casos importantes son el de dos jóvenes de la Universidad Pontificia Bolivariana, Luz Reyes que pertenece a la religión evangélica y Mary Guerra que también pertenecía a ésta religión, pero por motivos de “moda”, decidió alejarse de ella. Luz Reyes tomó la decisión de pertenecer a la religión cristiana- evangélica hace diez años, lo hizo porque se sentía inclinada con las creencias de esa religión. Respeta todas las religiones, pero, para ella, las ideologías que maneja la iglesia cristiana son muy distintas a las que profesan otras religiones. Ellos son trinitarios, es decir, tienen en cuenta al Padre, Hijo y Espíritu Santo, realizan culto los domingos y ayunos. Tienen un estilo de vida diferente. Por otro lado Mary Guerra afirma, que su experiencia también como joven cristiana- evangélica fue maravillosa, porque tuvo muchos acercamientos con Dios. Todo esto la llevó a dejar muchas cosas que a ella como joven le gusta, como las rumbas, pasar el tiempo con la pareja, dejar de tomar, cosas que no le prohíben desde un principio, pero que en el proceso que llevaba la hicieron cambiar de vida. Dejó de pertenecer a su religión porque no pudo luchar contra esos factores que en verdad le gustaban. Es indispensable reconocer que a pesar de que las personas tiendan por una ideología distinta, aquellas que llevan un mismo camino, no respetan las reglas o parámetros que instauran las instituciones religiosas, y se ve una desigualdad entre la misma fe que se profese. A raíz de este pluralismo religioso, se puede afirmar que algunas personas viven la religión como una moda, y que son muy pocas las personas que por tradición cultural o por herencia ideología, optan por tener una religión que los pueda identificar, resaltando que otras si saben que buscan con un Dios ya que vinieron para estar al servicio de la sociedad, esta sociedad que está sumergida en un universo superficial.